¿Qué es el DMX? Puede que hayas oído hablar de esta tecnología, pero no sepas exactamente lo que es.
Hoy vamos a explicar qué es el DMX, y las aplicaciones que tiene en hoteles. Sigue leyendo para descubrir por qué es perfecto para tu proyecto.
DMX es el acrónimo de Digital Multiplex, y es un protocolo de control de iluminación que permite a los usuarios tener el control de todas las luminarias. A pesar de que pueda parecer algo novedoso, fue creado en 1986 y se revisó posteriormente en 1990. Normalmente lo vemos en conciertos, obras de teatro o espectáculos, porque da la posibilidad de crear increíbles shows de luces solamente con una consola de DMX.
En un principio, el DMX nació como una forma de unificar la incompatibilidad que existía entre las marcas. Hasta ese momento, cada marca tenía su propio controlador; pero es a partir de la introducción de esta tecnología cuando se empezó a poder controlar todo desde un mismo lugar. De esta manera, el mundo de la iluminación ganó mayor libertad y flexibilidad.
Hoy en día, su propósito es mucho más amplio. Ahora da la posibilidad de crear un auténtico show de luces solamente utilizando una consola de DMX o el click de un ratón. Se pueden manejar diferentes parámetros, como el color, la posición o la intensidad, sin necesidad de conocer exactamente cómo funciona el DMX, aunque sí hay ciertas normas y técnicas que nos ayudarán a ejecutarlo de manera apropiada.
Ahora puede que estés pensando cómo el DMX puede ser una buena elección para tu hotel. Hay múltiples opciones; por ejemplo, la mayoría de hoteles ofrecen un show nocturno para sus huéspedes. Este sistema da la oportunidad de crear shows más atractivos y hacer la experiencia inolvidable.
Otra opción es el bar. Todos los hoteles tienen uno, y un sistema como este ofrece la posibilidad de configurar las luces para que se muevan al ritmo de la música.
Fotografías cortesía de Iberostar y Meliá
Pero no todo es fiesta y espectáculos; si lo que quieres crear es un ambiente relajante, el DMX puede ayudarte. Simplemente programa tonos más brillantes por la mañana, y más relajados por la noche. Jugando con la cromoterapia conseguirás crear experiencias únicas.
Además, el DMX te permite mejorar las sensaciones de los huéspedes cambiando las luces de las habitaciones, los salones y los jardines que rodean el hotel.
¿Todavía sigues pensando que el DMX no sirve para tu negocio?